Trasladaron a Menéndez a Tucumán para otro juicio

sábado, 2 de agosto de 2008
Desaparición del ex senador peronista Guillermo Vargas Aignase - 02/08/2008


El represor Luciano Benjamín Menéndez, condenado recientemente por crímenes de lesa humanidad a cadena perpetua, fue trasladado ayer a San Miguel de Tucumán, donde a partir del martes 5 deberá afrontar un nuevo juicio en su contra.

En un avión del Ejército Menéndez fue llevado a Tucumán donde deberá comparecer como ex titular del III Cuerpo de Ejército durante la dictadura, junto al ex gobernador de esa provincia, Domingo Antonio Bussi.

Menéndez quedó alojado en el ex Arsenal Miguel de Azcuénaga, una dependencia militar que fue el más importante centro clandestino de detención del norte argentino.

Junto a su subordinado Bussi, ex titular de la Quinta Brigada de Infantería del Ejército, Menéndez está acusado de la desaparición del senador provincial Guillermo Vargas Aignasse, detenido el mismo 24 de marzo de 1976 en la cárcel de Villa Urquiza, y posteriormente sometido a un "simulacro de liberación" para ser pasado a la clandestinidad y nunca más visto con vida, con excepción de la Jefatura de Policía.

La lectura de la acusación está prevista para el 5 de agosto a las 9.30 y el día siguiente ya comenzarán a declarar los 27 testigos previstos, muchos de ellos víctimas de la dictadura, pero también ex personal penitenciario y miembros de fuerzas de seguridad, a un ritmo estimado de 6 por día.

Mientras tanto, los defensores oficiales formalizaron ayer el pedido de arresto domiciliario para Menéndez y otros tres represores condenados recientemente en Córdoba y alojados en una cárcel común.

Los abogados Adriano Liva y Mercedes Crespi presentaron el planteo ante el Tribunal Federal Oral 1, de la capital de Córdoba, que tuvo a cargo el juicio y sentencia para los represores.

La detención domiciliaria fue solicitada para el general Menéndez (81 años); el coronel Hermes Rodríguez (75); el suboficial principal Carlos Vega (79) y el agente civil de inteligencia Ricardo Lardone (65). Se trata de mayores de 70 años o detenidos con problemas de salud, según la defensa.


(fuente)

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