martes, 21 de abril de 2009
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Uruguay perdió su slogan "Uruguay Natural" - 21/04/2009
MALAS NOTICIAS PARA NUESTRO RÍO URUGUAY
Finlandia y Uruguay, cómplices en ocultar la contaminación
El ingeniero Elías Matta brindó los argumentos en un informe especial para El Día. Los números muestran todo lo contrario a lo que se declama: la contaminación de Botnia está afectando a nuestro Río Uruguay.
Por el Ing. Elías Matta*
[ En la foto: Estrada Oyuela (izq.) y Elías Matta (der) ]
Recientemente, 15 de abril de 2009, el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTMA) de la República Oriental del Uruguay dio una conferencia de prensa en Fray Bentos, repartiéndose en la ocasión un juego de folletería que incluía un “Informe para la Comisión de Seguimiento de Botnia” con fecha del día (10 páginas), y un denominado “Control de Emisiones y Desempeño Ambiental. Primer Año de Operación de Botnia”, con fecha Febrero de 2009 y firmado por la DINAMA (27 diapositivas).
Entre las afirmaciones realizadas en dicho material, destacamos las siguientes:
a. La actividad de Botnia no implicó cambios en la calidad del agua del río Uruguay.
b. Botnia es la industria ambientalmente mejor controlada en Uruguay (y probablemente de la región).
c. Las condiciones que Uruguay le impuso a esta fábrica para habilitar su funcionamiento se cuentan entre las más exigentes del mundo.
d. El desempeño de Botnia es completamente satisfactorio en relación a estos requisitos… durante el primer año de operación su desempeño ambiental corresponde a una buena “performance”.
Daño evidente
Lo primero que debe decirse, tanto a los dirigentes como a los ciudadanos uruguayos y argentinos, es que los números muestran todo lo contrario a lo que se declama: la contaminación de Botnia está afectando a nuestro Río Uruguay. El daño es incipiente, pero más que evidente…incluyendo a la “calidad del agua”. Esto es lo que muestran los panfletos de propaganda antes mencionados. También lo que surge de los dos últimos informes técnicos de EcoMetrix, “consultora independiente” del Banco Mundial.
Los niveles de contaminación
De los informes EcoMetrix surgen también los datos para proyectar la magnitud de la contaminación: más de 21.000 toneladas de tóxicos que Botnia emitió - al río y a la atmósfera circundante, desde su arranque hasta abril de 2009. A ello deben sumarse unos 70 millones de unidades tóxicas (ng TEQ) de Dioxinas y Furanos. No se ha contado en estos totales los numerosos incidentes de escape masivo de gases igualmente tóxicos que ha sufrido la población, denominados por Botnia como “olores que no provocan daño”. Tampoco la descarga al río de 3000 m3 de compuestos químicos orgánicos muy peligrosos, ocurrida los días 3 y 4 de febrero de 2009, que se dispersó desde Fray Bentos hasta Concepción del Uruguay.
Botnia no está realizando un “buen desempeño ambiental”. Por el contrario, está generando más contaminación de lo que los expertos optimistas esperaban. Tanto por sus emisiones contínuas como por la frecuencia y magnitud de los incidentes operacionales. Malas noticias para nuestro río. Mala noticia para los habitantes de la región.
Un contaminante dinosaurio
No se puede contestar técnicamente las afirmaciones políticas del gobierno uruguayo. Pero a la fecha, ningún entendido -ni siquiera EcoMetrix o el Banco Mundial, sigue pensando que las condiciones que se impusieron a Botnia para operar “se cuentan entre las más exigentes del mundo” o que realmente alguien seriamente “controla sus emisiones”. La planta Kraft con blanqueo ECF de Botnia Fray Bentos tiene sin duda una moderna tecnología…pero sigue siendo un enorme y contaminante dinosaurio. Un resabio de principios del Siglo XX que la industria debió dejar atrás hace varias décadas, aplicando sentido común, investigación e inversiones bien dirigidas. La insaciable sed de ganancias del “hombre moderno” le dio mega-dimensiones y la colocó –seguramente sin percatarse–, donde más daño puede hacer.
La experiencia mundial, estudiada y evaluada por la ciencia durante los últimos 30 años, es terminante: no hay ningún ecosistema capaz de soportar por mucho tiempo una carga contaminante de la magnitud de la que Botnia está generando en la baja cuenca del Río Uruguay. Pero debe explicarse claramente, no estamos hablando sólo de la “calidad del agua” o de la “calidad del aire”. Lo que está en inminente peligro es la salud de 150.000 habitantes de la región, la calidad de la tierra y los animales que producimos y consumimos. Claro, también está en peligro nuestro río, el río de uruguayos y argentinos, que tanto técnica como socialmente…es mucho más que agua.
* El autor es ingeniero químico: ematta@fiq.unl.edu.ar / ematta@intec.unl.edu.ar
(fuente)
MALAS NOTICIAS PARA NUESTRO RÍO URUGUAY
Finlandia y Uruguay, cómplices en ocultar la contaminación
El ingeniero Elías Matta brindó los argumentos en un informe especial para El Día. Los números muestran todo lo contrario a lo que se declama: la contaminación de Botnia está afectando a nuestro Río Uruguay.
Por el Ing. Elías Matta*
[ En la foto: Estrada Oyuela (izq.) y Elías Matta (der) ]
Recientemente, 15 de abril de 2009, el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTMA) de la República Oriental del Uruguay dio una conferencia de prensa en Fray Bentos, repartiéndose en la ocasión un juego de folletería que incluía un “Informe para la Comisión de Seguimiento de Botnia” con fecha del día (10 páginas), y un denominado “Control de Emisiones y Desempeño Ambiental. Primer Año de Operación de Botnia”, con fecha Febrero de 2009 y firmado por la DINAMA (27 diapositivas).
Entre las afirmaciones realizadas en dicho material, destacamos las siguientes:
a. La actividad de Botnia no implicó cambios en la calidad del agua del río Uruguay.
b. Botnia es la industria ambientalmente mejor controlada en Uruguay (y probablemente de la región).
c. Las condiciones que Uruguay le impuso a esta fábrica para habilitar su funcionamiento se cuentan entre las más exigentes del mundo.
d. El desempeño de Botnia es completamente satisfactorio en relación a estos requisitos… durante el primer año de operación su desempeño ambiental corresponde a una buena “performance”.
Daño evidente
Lo primero que debe decirse, tanto a los dirigentes como a los ciudadanos uruguayos y argentinos, es que los números muestran todo lo contrario a lo que se declama: la contaminación de Botnia está afectando a nuestro Río Uruguay. El daño es incipiente, pero más que evidente…incluyendo a la “calidad del agua”. Esto es lo que muestran los panfletos de propaganda antes mencionados. También lo que surge de los dos últimos informes técnicos de EcoMetrix, “consultora independiente” del Banco Mundial.
Los niveles de contaminación
De los informes EcoMetrix surgen también los datos para proyectar la magnitud de la contaminación: más de 21.000 toneladas de tóxicos que Botnia emitió - al río y a la atmósfera circundante, desde su arranque hasta abril de 2009. A ello deben sumarse unos 70 millones de unidades tóxicas (ng TEQ) de Dioxinas y Furanos. No se ha contado en estos totales los numerosos incidentes de escape masivo de gases igualmente tóxicos que ha sufrido la población, denominados por Botnia como “olores que no provocan daño”. Tampoco la descarga al río de 3000 m3 de compuestos químicos orgánicos muy peligrosos, ocurrida los días 3 y 4 de febrero de 2009, que se dispersó desde Fray Bentos hasta Concepción del Uruguay.
Botnia no está realizando un “buen desempeño ambiental”. Por el contrario, está generando más contaminación de lo que los expertos optimistas esperaban. Tanto por sus emisiones contínuas como por la frecuencia y magnitud de los incidentes operacionales. Malas noticias para nuestro río. Mala noticia para los habitantes de la región.
Un contaminante dinosaurio
No se puede contestar técnicamente las afirmaciones políticas del gobierno uruguayo. Pero a la fecha, ningún entendido -ni siquiera EcoMetrix o el Banco Mundial, sigue pensando que las condiciones que se impusieron a Botnia para operar “se cuentan entre las más exigentes del mundo” o que realmente alguien seriamente “controla sus emisiones”. La planta Kraft con blanqueo ECF de Botnia Fray Bentos tiene sin duda una moderna tecnología…pero sigue siendo un enorme y contaminante dinosaurio. Un resabio de principios del Siglo XX que la industria debió dejar atrás hace varias décadas, aplicando sentido común, investigación e inversiones bien dirigidas. La insaciable sed de ganancias del “hombre moderno” le dio mega-dimensiones y la colocó –seguramente sin percatarse–, donde más daño puede hacer.
La experiencia mundial, estudiada y evaluada por la ciencia durante los últimos 30 años, es terminante: no hay ningún ecosistema capaz de soportar por mucho tiempo una carga contaminante de la magnitud de la que Botnia está generando en la baja cuenca del Río Uruguay. Pero debe explicarse claramente, no estamos hablando sólo de la “calidad del agua” o de la “calidad del aire”. Lo que está en inminente peligro es la salud de 150.000 habitantes de la región, la calidad de la tierra y los animales que producimos y consumimos. Claro, también está en peligro nuestro río, el río de uruguayos y argentinos, que tanto técnica como socialmente…es mucho más que agua.
* El autor es ingeniero químico: ematta@fiq.unl.edu.ar / ematta@intec.unl.edu.ar
(fuente)
1 comentarios:
Tenemos que desemascarar a los mafiosas que admien este atropello a los derechos humanos .
Ya hay gente enferma, ¿que esperamos , ?
Garacias por esta lucha compañeros
Maria
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