Encontré otro amigo... y van...?

lunes, 24 de noviembre de 2008
Un uruguayo de los buenos y nobles - 24/11/2008



CARTA ABIERTA De un oriental-entrerriano al Presidente Tabaré Vázquez
Concordia, 20 de Enero de 2006
Cuando me decidí a iniciar estas líneas, no tenía muy en claro, que es lo que iba a poner en ellas, sólo me animaba un sentimiento, cuyo espíritu está sintetizado en el titulo de esta nota, pues así me siento, nací en 1955 en Montevideo, Uruguay, y en 1974, como tantos otros “emigré” hacia la Argentina, recalando definitivamente en 1978 en estas tierras de la Provincia de Entre Ríos, la misma que luce orgullosamente como su bandera, la de Don José Gervasio Artigas, la misma que integrara la Liga Federal por él encabezada como Protector de los Pueblos Libres, junto a las hoy Provincias argentinas de Corrientes, Santa Fé, Córdoba y Misiones.
Aquí en las cercanías de Concordia, fue donde Artigas en su épico Éxodo del Pueblo Oriental, y luego de cruzar el Río Uruguay, estableciera su campamento en el Ayuí, hecho que se recuerda con un monumento emplazado en el Parque San Carlos de esta, mi ciudad, Concordia.
En esa época, no existían todavía las categorías artificiales de argentinos y uruguayos, y el Río Uruguay pese a no tener puentes para cruzarlo, parecía unir más a orientales y a entrerrianos, que en la actualidad, tal es así que de un lado a otro se cruzaba, para pelear por las ideas de independencia y la libertad, o era lugar de resguardo cuando se era perseguido por los mismos motivos.
Antes de emigrar para Argentina, y con quince años (en 1971), tuve la oportunidad de participar como uno más de aquellos, que participaron de esa “aventura” del Frente Amplio, participando en los Comités de Base, pegando carteles y tomando parte en aquellas maravillosas movilizaciones, en las cuales parecía que todo era posible. Luego vino en 1973 el Golpe de estado, la resistencia, y los años oscuros de la dictadura, que desmembró mi familia, como la de tantos otros compatriotas.

Esta tierra me acogió como un hijo más, aquí formé mi familia, aquí vivo y trabajo, y es también sin lugar a dudas mi tierra. Este Entre Ríos prodigioso, con sus ríos, arroyos, con sus verdes y con su gente, apuesta para su desarrollo (como el Uruguay), entre otras cosas, fuertemente al turismo, como fuente de ingresos, y no puedo menos que ponerme en el lugar de un habitante de la pujante Gualeguaychú, que hoy unida, pelea con uñas y dientes, por preservar y acrecentar, aquello que tantos años y esfuerzo les costó construir.

Por ser éste tema de las celulosas, un tema heredado, es que me resulta incomprensible, el que se asuman como propios de su Gobierno los desaciertos del gobierno “blanquirado” o “coloranco”, que fue el que hizo estos “negocios”, asumió los compromisos con ENCE y BOTNIA, y cometió los errores desde un comienzo, al no sujetarse a lo previsto en el Estatuto del Río Uruguay, Tratado que ambos países firmaron, ya hace mucho tiempo, y que por ende están obligados a respetar, por lo cual estas plantas que se están instalando, no lo podrían hacer, si no es con el consentimiento de la Argentina, porque lo hacen sobre un curso de agua que es de soberanía compartida.

Y no puedo menos que recordarle lo que Ud. dijera el 4 de Octubre de 2004 en el Salón Azul de la Intendencia Municipal de Montevideo, dentro de lo que definiera como Uruguay Integrado: “…El respeto al Derecho Internacional, entendiendo que las normas, que ordenan y regulan las relaciones entre los Estados constituyen la mejor forma de garantizar la convivencia pacífica y el respeto a los derechos soberanos de los pueblos...”

Recuerdo, la clara, fundamentada y valiente oposición a la instalación de estas plantas de celulosa por parte del Frente, (cuando no se estaba en el gobierno) por sus inevitables consecuencias ambientales, hecho por demás comprobado por la experiencia internacional, y ahora por la dilación de su gobierno en presentar las pruebas que lo contradigan, y por su elusión en realizar estudios ambientales independientes.

Me duele, ver crecer la irreductibilidad de las posiciones, los peligrosos chauvinismos, y la defensa de lo indefendible. Y más me duele pensar, que las actitudes de su Gobierno puedan estar destinadas a “tranquilizar”, tal vez a los “inversores”, a los “mercados”, a quienes nadie votó, olvidando el doble mandato que su Gobierno y el Frente Amplio tienen: el de los que votaron por lo que se prometió, por el “Gobierno del cambio” y el mandato de sangre, y la memoria de todos aquellos que murieron, para llegar a esta realidad de un Gobierno popular, luego de 34 años.

¿No cree Ud. compañero Tabaré Vázquez que es momento, como se dice comúnmente, de barajar y dar de nuevo? ¿De parar la pelota, de “enfriar el partido”, y de paso las mentes, y buscar seriamente una solución?

¿De no seguir cometiendo, o asumiendo como propios los errores del pasado? Seguramente, que la contaminación del Río Uruguay excede, la mera problemática de las celulosas, pero no sigamos avanzando en su degradación, y en todo caso trabajemos seriamente ambos países, para evitar que en el futuro, se transforme en una cloaca a cielo abierto.

Trabajemos con la mente abierta para que el Río Uruguay vuelva a ser una fresca corriente de unión y no un torrente de incomprensión.

Manuel Anido DNI 92.203.144 - Credencial Cívica AOA 6192 - manuelanido@hotmail.com - manuelanido2003@yahoo.com.ar
(fuente)

1 comentarios:

Marta Repupilli dijo...

No conocia tu blog. Me encantó, las tematicas y tamben el diseño. Salu2