viernes, 30 de enero de 2009
Posted in
ARACRUZ
,|
ARAUCO
,|
ARGENTINA
,|
ASAMBLEA
,|
BOTNIA
,|
BRASIL
,|
COLON
,|
DIOXINAS
,|
ENCE
,|
EUCALIPTUS
,|
FRAY BENTOS
,|
GUALEGUAYCHU
,|
GUAYUBIRA
,|
PASTERA
,|
PORTUCEL
,|
TABARE
,|
URUGUAY
,|
VIOLACION
|
También desde Chile - 30/01/2009
Comunicado de prensa - diciembre 2008
Llamado urgente a suspender la forestación
Organizaciones sociales y productores rurales reiteran llamamiento a suspender la forestación y exhortan a que el problema de la tierra, su tenencia y la producción familiar ocupe un lugar central en las agendas de todos los partidos políticos.
Montevideo, 22 de diciembre de 2008.
El día 12 de diciembre pasado, integrantes de organizaciones sociales, ambientales, productores rurales y ciudadanos de distintas zonas del país afectadas por plantaciones forestales, se reunieron en Montevideo para intercambiar experiencias y denunciar la acumulación de impactos socio-ambientales que genera el modelo forestal agroindustrial.
Los temas vinculados a la concentración y extranjerización de la tierra, las dificultades que enfrentan la pequeña y mediana producción rural así como el acceso a la tierra y la pérdida de fuentes de agua fueron centrales en el debate.
En relación a la tierra, desde la perspectiva de la soberanía alimentaria, los participantes de la reunión manifestaron la urgencia de frenar el avance del actual proceso de concentración y extranjerización, del cual la expansión del sector forestal es uno de sus principales responsables. En tal sentido, como una de las alternativas de lucha se manifestó el apoyo a la Iniciativa de Reforma Constitucional que plantea que la propiedad inmueble rural podrá adquirirse por personas jurídicas estatales o por ciudadanos naturales o legales, estableciendo la ley el máximo que podrá adquirir cada ciudadano. En tanto, y a los efectos de promover una acción inmediata frente a esta problemática, se manifiesta el apoyo al Proyecto de Ley que fuera recientemente presentado por la Comisión Nacional contra la Extranjerización de las Tierras Uruguayas, a los parlamentarios de todas las bancadas, para declarar la moratoria a la venta de tierra a extranjeros no residentes (sea persona física o jurídica), y a los nuevos emprendimientos forestales, con vigencia hasta el 25 de octubre de 2009.
Considerando que se ha ingresado en un proceso de cambio climático donde la sequía pasa a formar parte de la dinámica ambiental de la región, se denunció que la forestación agudiza la vulnerabilidad a la misma afectando gravemente los pozos comunes, artesianos y otras fuentes de agua que son alimentadas por las capas freáticas, y compromete la continuidad de los cursos de ríos, arroyos y cañadas. Como consecuencia inmediata, impacta negativamente en la población y la producción rural.
Por otra parte, en compás con las “políticas de buen relacionamiento con la sociedad” que promueven las empresas forestales y celulósicas, el gobierno habla del “silvopastoreo” como el modelo de integración de “la vaca y el árbol”. Pero el modelo de monocultivo a gran escala que aplican las empresas forestales en el campo uruguayo es un modelo que ha comprobado acelerar la exclusión rural. Por lo tanto, el silvopastoreo, además de ser una etiqueta vacía y una forma de continuar la actividad y expansión forestal, es una estrategia para ocultar la pérdida de soberanía alimentaria que se encuentra asociada a la falta de políticas responsables para atenuar el éxodo rural.
Entre las denuncias presentadas por productores rurales participantes de la reunión se señaló que la escasez de pastos en calidad y cantidad suficiente en la plantación no asegura el engorde del ganado, con lo cual la plantación se utiliza prácticamente “como galpón”. Otras de las denuncias realizadas se refirieron al aumento del precio de la renta para el silvopastoreo, transformándose en un elemento que se suma a la exclusión ya mencionada, atentando contra la rentabilidad ganadera. Finalmente se señaló que la dificultad de arrear el ganado que tiende a esconderse en la forestación obstaculiza el cumplimiento de los programas sanitarios previstos por exigencia nacional e internacional, en especial la vacunación contra la aftosa.
Apenas tres empresas transnacionales (Botnia, Ence y Weyerhaeuser) son dueñas de al menos 520.000 hectáreas de tierras, de las que han desplazado a pequeños productores rurales y productores familiares lesionando gravemente la identidad cultural y territorial. Los volúmenes comprometidos de empleo no se cumplen, mientras el desenfrenado proceso tecnológico compromete aún más la continuidad de los actuales. Río Negro constituye un caso emblemático de la mentira del modelo forestal celulósico: con una enorme masa forestal y una fábrica de celulosa de última generación, es el departamento que registra el mayor nivel de desempleo del país.
Las empresas forestales ponen en jaque la posibilidad de alcanzar un Uruguay productivo con justicia social, donde la tierra y el agua sean elementos centrales de la soberanía territorial y alimentaria. Bajo la lógica de la máxima ganancia, cada hectárea de tierra y cada arroyo que pasa a manos de las forestales va en detrimento de nuestra soberanía alimentaria.
Existe profusa documentación de los impactos de las plantaciones forestales sobre el agua, el suelo, la vegetación, la fauna, la familia rural y el empleo –falta de agua, plagas de jabalíes y zorros, desaparición de la identidad del lugar, precarización del trabajo. A eso se agrega que este modelo productivo trae aparejado el uso de agrotóxicos en toda la cadena productiva, agravando aun más los impactos.
Es necesario arrancar el velo de la mentira: lejos estamos del Uruguay natural. Nuestro país se encuentra a esta altura en un proceso de degradación socio-ambiental progresivo fruto esencialmente de la falta de voluntad política para implementar un modelo productivo incluyente y participativo y con bases en una visión diferente de uso y conservación sostenible de los distintos bienes y servicios de nuestro ambiente.
Conforme avanza el modelo forestal aumentan sus impactos, pero también crece la conciencia ciudadana sobre los mismos, que liberándose del chantaje del empleo y el desarrollo se suma a la resistencia en sus diversas formas.
Los participantes de la reunión hacen un llamado urgente a suspender la forestación y exhortan a que el problema de la tierra, su tenencia y la producción familiar ocupe un lugar central en las agendas de todos los partidos políticos.
Firman:
- Alicia Borges, Comisión Nacional contra la Extranjerización de las Tierras Uruguayas
- Alvaro Moraes, CAxTierra
- Ana Domínguez, Programa Uruguay Sustentable e Investigadora de la Facultad de Ciencias
- Ana María Janavel, pequeña productora rural
- Carlos Céspedes, Doctor en Ciencias Agronómicas
- Carlos Perez Arrarte, CIEDUR
- Comisión Nacional en Defensa del Agua y la Vida
- Daniel Campanella, MADUR y Grupo de productores y vecinos de Libertad
- Delia Villalba, ambientalista de Fray Bentos
- Diego Henderson, productor rural, integrante del Movimiento Nacional en defensa de la Tierra e integrante de la Asociación Nacional de Colonos
- Elizabeth Díaz, Grupo Guayubira
- Guillermo Macció, productor rural, Sociedad Ecológica San Gabriel
- Gustavo Piñeiro, Licenciado Geólogo
- Jorge Rochón, Asociación Agropecuaria de Tarariras
- José Luis Protti Rey, Técnico en Gestión de Recursos Naturales y Desarrollo Sustentable
- Juan Carlos Borgogno, Uruguay Natural Multiproductivo (UNAMU)
- Julio Castillo, Intersocial Salinas
- Lilián Martínez, MADUR y Grupo de productores y vecinos de Libertad
- Luis Alberto Facchin, pequeño productor rural
- Marcel Achkar, Programa Uruguay Sustentable e Investigador de la Facultad de Ciencias
- Marcelo Racchetti, Ingeniero Agrónomo, Unión de Vecinos Puerto La Paloma
- María Isabel Cárcamo, RAPAL-Uruguay
- María Panzacchi, Comisión Nacional contra la Extranjerización de las Tierras Uruguayas
- María Selva Ortiz, REDES/Amigos de la Tierra-Uruguay
- Mónica Litovsky, Grupo Guayubira
- Néstor Perdomo, CAxTierra
- Oscar Galli, REDES/Amigos de la Tierra-Uruguay
- Oscar Oudry, Centro Emmanuel
- Pablo Martínez, Movimiento de chacreros del ejido de Mercedes
- Raquel Núñez, Grupo Guayubira
- Ricardo Carrere, WRM
- Ricardo Rodríguez, Biólogo
- Teresa Pérez, WRM
- Washington Lockhart, Movimiento de chacreros del ejido de Mercedes
- Wladimir Sawchuk, Movimiento por la Tierra
(fuente)
Desde Chile :
Uruguay y Chile: mirando el modelo forestal frente al espejo
23 de enero de 2009.
Una vez más organizaciones sociales chilenas denuncian* que el "modelo forestal" chileno --tan utilizado por gobiernos y empresas como ejemplo para promocionar los monocultivos forestales a gran escala en otros países de la región-- sigue ocasionando grandes impactos ambientales, sociales y culturales.
Este "modelo forestal" viene acompañado de otro "modelo", y es el de los impactos ocasionados por la plantación en gran escala de monocultivos de pinos y eucaliptos --con destino a la exportación y a la producción de celulosa-- que también hemos venido documentando y denunciando las organizaciones ambientales y productores rurales en Uruguay
Algunos ejemplos denunciados por las organizaciones chilenas son:
- la pérdida de fuentes de agua
"la pérdida de fuentes de agua asociada a las plantaciones forestales se debe a varios factores, pero el principal es el elevado consumo de agua de estas especies para crecer rápidamente, tal como lo necesita la industria. Dado que se trata de extensas plantaciones creciendo a un ritmo muy acelerado, los impactos sobre el agua se vuelven cada vez más graves, llegando hasta la desaparición de manantiales y cursos de agua, como sucede en las provincias de Arauco, Región del Bio Bio y de Malleco y Cautín, Región de la Araucanía, donde entre los meses de Diciembre a Marzo las comunidades no tienen agua, y los municipios deben surtir con camiones aljibe a las comunidades, asumiendo un costo que es responsabilidad de las empresas forestales".
- la erosión de suelos, la pérdida de nutrientes y el uso de agrotóxicos
"la grave erosión que afecta a los suelos que son "reforestados" es cada vez mayor, la pérdida de nutrientes hace que los suelos sean cada vez menos productivos, considerando además las grandes cantidades de agro-tóxicos que se utilizan para controlar las plagas que se desarrollan en este tipo de monocultivo. Esto hace que los suelos ocupados por las plantaciones queden inutilizados para cualquier otra actividad".
- el fomento de la actividad forestal en desmedro de la actividad campesina
"las comunas con las mayores superficies de plantaciones, presentan los menores índices de desarrollo humano del país, así como las tasas de migración más altas, llegando a tasas de crecimiento poblacional negativo en algunas comunas. Sin mencionar los graves impactos a las economías locales y la disminución en la producción de alimentos para el país".
- la generación de empleos precarios y con dificultades de sindicalización
"la precariedad de los empleos del sector forestal no justifican seguir con la destrucción que las plantaciones han generado. En Chile hay 133 mil trabajadores forestales, de ellos, sólo entre el 25 y 30% tiene contrato permanente; el 82% se encuentra bajo la línea de la pobreza; la subcontratación ha dificultado la generación de derechos colectivos".
En Uruguay vemos como lamentablemente se aplica este "modelo". Sólo a modo de ejemplo hacemos dos reflexiones: Río Negro, uno de los departamentos más forestados y con una mega-fábrica de celulosa, es el departamento con mayor desempleo del país. En Soriano, donde la forestación impactó gravemente sobre el agua, se pasó de 14 familias a las cuales se les llevaba agua en camiones cisterna en el año 2000 a un total de 200 familias en la actualidad.
Las organizaciones sociales chilenas afirman que: "este Modelo Forestal es responsable de incrementar la pérdida de suelos agrícolas, disminuir y desaparecer las fuentes de agua subterráneas y superficiales, sustituir el bosque nativo, destruir la forma de vida y la cultura de las comunidades".
En Uruguay, organizaciones sociales y productores rurales reiteran un llamamiento a suspender la forestación y exhortan a que el problema de la tierra, su tenencia y la producción familiar ocupe un lugar central en las agendas de todos los partidos políticos.
Situaciones similares se dan en todos los países del Sur donde se siguen promoviendo los monocultivos de árboles a gran escala. ¿No será hora de que los representantes de gobierno de cada uno de estos países escuchen estas voces?
Comunicado de prensa - diciembre 2008
Llamado urgente a suspender la forestación
Organizaciones sociales y productores rurales reiteran llamamiento a suspender la forestación y exhortan a que el problema de la tierra, su tenencia y la producción familiar ocupe un lugar central en las agendas de todos los partidos políticos.
Montevideo, 22 de diciembre de 2008.
El día 12 de diciembre pasado, integrantes de organizaciones sociales, ambientales, productores rurales y ciudadanos de distintas zonas del país afectadas por plantaciones forestales, se reunieron en Montevideo para intercambiar experiencias y denunciar la acumulación de impactos socio-ambientales que genera el modelo forestal agroindustrial.
Los temas vinculados a la concentración y extranjerización de la tierra, las dificultades que enfrentan la pequeña y mediana producción rural así como el acceso a la tierra y la pérdida de fuentes de agua fueron centrales en el debate.
En relación a la tierra, desde la perspectiva de la soberanía alimentaria, los participantes de la reunión manifestaron la urgencia de frenar el avance del actual proceso de concentración y extranjerización, del cual la expansión del sector forestal es uno de sus principales responsables. En tal sentido, como una de las alternativas de lucha se manifestó el apoyo a la Iniciativa de Reforma Constitucional que plantea que la propiedad inmueble rural podrá adquirirse por personas jurídicas estatales o por ciudadanos naturales o legales, estableciendo la ley el máximo que podrá adquirir cada ciudadano. En tanto, y a los efectos de promover una acción inmediata frente a esta problemática, se manifiesta el apoyo al Proyecto de Ley que fuera recientemente presentado por la Comisión Nacional contra la Extranjerización de las Tierras Uruguayas, a los parlamentarios de todas las bancadas, para declarar la moratoria a la venta de tierra a extranjeros no residentes (sea persona física o jurídica), y a los nuevos emprendimientos forestales, con vigencia hasta el 25 de octubre de 2009.
Considerando que se ha ingresado en un proceso de cambio climático donde la sequía pasa a formar parte de la dinámica ambiental de la región, se denunció que la forestación agudiza la vulnerabilidad a la misma afectando gravemente los pozos comunes, artesianos y otras fuentes de agua que son alimentadas por las capas freáticas, y compromete la continuidad de los cursos de ríos, arroyos y cañadas. Como consecuencia inmediata, impacta negativamente en la población y la producción rural.
Por otra parte, en compás con las “políticas de buen relacionamiento con la sociedad” que promueven las empresas forestales y celulósicas, el gobierno habla del “silvopastoreo” como el modelo de integración de “la vaca y el árbol”. Pero el modelo de monocultivo a gran escala que aplican las empresas forestales en el campo uruguayo es un modelo que ha comprobado acelerar la exclusión rural. Por lo tanto, el silvopastoreo, además de ser una etiqueta vacía y una forma de continuar la actividad y expansión forestal, es una estrategia para ocultar la pérdida de soberanía alimentaria que se encuentra asociada a la falta de políticas responsables para atenuar el éxodo rural.
Entre las denuncias presentadas por productores rurales participantes de la reunión se señaló que la escasez de pastos en calidad y cantidad suficiente en la plantación no asegura el engorde del ganado, con lo cual la plantación se utiliza prácticamente “como galpón”. Otras de las denuncias realizadas se refirieron al aumento del precio de la renta para el silvopastoreo, transformándose en un elemento que se suma a la exclusión ya mencionada, atentando contra la rentabilidad ganadera. Finalmente se señaló que la dificultad de arrear el ganado que tiende a esconderse en la forestación obstaculiza el cumplimiento de los programas sanitarios previstos por exigencia nacional e internacional, en especial la vacunación contra la aftosa.
Apenas tres empresas transnacionales (Botnia, Ence y Weyerhaeuser) son dueñas de al menos 520.000 hectáreas de tierras, de las que han desplazado a pequeños productores rurales y productores familiares lesionando gravemente la identidad cultural y territorial. Los volúmenes comprometidos de empleo no se cumplen, mientras el desenfrenado proceso tecnológico compromete aún más la continuidad de los actuales. Río Negro constituye un caso emblemático de la mentira del modelo forestal celulósico: con una enorme masa forestal y una fábrica de celulosa de última generación, es el departamento que registra el mayor nivel de desempleo del país.
Las empresas forestales ponen en jaque la posibilidad de alcanzar un Uruguay productivo con justicia social, donde la tierra y el agua sean elementos centrales de la soberanía territorial y alimentaria. Bajo la lógica de la máxima ganancia, cada hectárea de tierra y cada arroyo que pasa a manos de las forestales va en detrimento de nuestra soberanía alimentaria.
Existe profusa documentación de los impactos de las plantaciones forestales sobre el agua, el suelo, la vegetación, la fauna, la familia rural y el empleo –falta de agua, plagas de jabalíes y zorros, desaparición de la identidad del lugar, precarización del trabajo. A eso se agrega que este modelo productivo trae aparejado el uso de agrotóxicos en toda la cadena productiva, agravando aun más los impactos.
Es necesario arrancar el velo de la mentira: lejos estamos del Uruguay natural. Nuestro país se encuentra a esta altura en un proceso de degradación socio-ambiental progresivo fruto esencialmente de la falta de voluntad política para implementar un modelo productivo incluyente y participativo y con bases en una visión diferente de uso y conservación sostenible de los distintos bienes y servicios de nuestro ambiente.
Conforme avanza el modelo forestal aumentan sus impactos, pero también crece la conciencia ciudadana sobre los mismos, que liberándose del chantaje del empleo y el desarrollo se suma a la resistencia en sus diversas formas.
Los participantes de la reunión hacen un llamado urgente a suspender la forestación y exhortan a que el problema de la tierra, su tenencia y la producción familiar ocupe un lugar central en las agendas de todos los partidos políticos.
Firman:
- Alicia Borges, Comisión Nacional contra la Extranjerización de las Tierras Uruguayas
- Alvaro Moraes, CAxTierra
- Ana Domínguez, Programa Uruguay Sustentable e Investigadora de la Facultad de Ciencias
- Ana María Janavel, pequeña productora rural
- Carlos Céspedes, Doctor en Ciencias Agronómicas
- Carlos Perez Arrarte, CIEDUR
- Comisión Nacional en Defensa del Agua y la Vida
- Daniel Campanella, MADUR y Grupo de productores y vecinos de Libertad
- Delia Villalba, ambientalista de Fray Bentos
- Diego Henderson, productor rural, integrante del Movimiento Nacional en defensa de la Tierra e integrante de la Asociación Nacional de Colonos
- Elizabeth Díaz, Grupo Guayubira
- Guillermo Macció, productor rural, Sociedad Ecológica San Gabriel
- Gustavo Piñeiro, Licenciado Geólogo
- Jorge Rochón, Asociación Agropecuaria de Tarariras
- José Luis Protti Rey, Técnico en Gestión de Recursos Naturales y Desarrollo Sustentable
- Juan Carlos Borgogno, Uruguay Natural Multiproductivo (UNAMU)
- Julio Castillo, Intersocial Salinas
- Lilián Martínez, MADUR y Grupo de productores y vecinos de Libertad
- Luis Alberto Facchin, pequeño productor rural
- Marcel Achkar, Programa Uruguay Sustentable e Investigador de la Facultad de Ciencias
- Marcelo Racchetti, Ingeniero Agrónomo, Unión de Vecinos Puerto La Paloma
- María Isabel Cárcamo, RAPAL-Uruguay
- María Panzacchi, Comisión Nacional contra la Extranjerización de las Tierras Uruguayas
- María Selva Ortiz, REDES/Amigos de la Tierra-Uruguay
- Mónica Litovsky, Grupo Guayubira
- Néstor Perdomo, CAxTierra
- Oscar Galli, REDES/Amigos de la Tierra-Uruguay
- Oscar Oudry, Centro Emmanuel
- Pablo Martínez, Movimiento de chacreros del ejido de Mercedes
- Raquel Núñez, Grupo Guayubira
- Ricardo Carrere, WRM
- Ricardo Rodríguez, Biólogo
- Teresa Pérez, WRM
- Washington Lockhart, Movimiento de chacreros del ejido de Mercedes
- Wladimir Sawchuk, Movimiento por la Tierra
(fuente)
Desde Chile :
DECLARACION PÚBLICA
Temuco, 17 de enero de 2009. Con motivo del recién anunciado incremento transitorio de los beneficios del Decreto Ley 701 de subsidio a las Plantaciones Forestales y conociendo los profundos impactos ambientales, sociales y culturales de éstas, Organizaciones reunidas en Temuco en el Foro- Taller: Implicancias de las Plantaciones Forestales en el Cambio Climático, la Desertificación y la Sequía declaramos lo siguiente:
El Decreto Ley 701 es el principal instrumento de un modelo forestal que ha contribuido a una apropiación injusta y desproporcionada de la tierra, que se ha expandido sustituyendo Bosque Nativo y ocupando suelos agrícolas de buena calidad para dejarlos inutilizados. Se crea en 1974, en época de dictadura militar, lo que propició la ocupación de territorios del Pueblo mapuche, monopolizándolos en 2 grandes grupos económicos: El grupo familiar Matte (CMPC) y el grupo Angelini (Copec – Arauco - Celco).
La ley de fomento forestal nace con el objetivo de recuperar los suelos dañados, sin embargo lo que en realidad incentiva es el monocultivo industrial intensivo y extensivo, no la reforestación de predios degradados. El tipo de plantaciones que se está promoviendo es nefasto. En el caso de las plantaciones chilenas no existe recuperación de suelos, el resultado de más de 30 años de aplicación de este modelo se caracteriza por:
Primero, la grave erosión que afecta a los suelos que son "reforestados" es cada vez mayor, la pérdida de nutrientes hace que los suelos sean cada vez menos productivos, considerando además las grandes cantidades de agro-tóxicos que se utilizan para controlar las plagas que se desarrollan en este tipo de monocultivo. Esto hace que los suelos ocupados por las plantaciones queden inutilizados para cualquier otra actividad.
Segundo, la pérdida de fuentes de agua asociada a las plantaciones forestales se debe a varios factores, pero el principal es el elevado consumo de agua de estas especies para crecer rápidamente, tal como lo necesita la industria. Dado que se trata de extensas plantaciones creciendo a un ritmo muy acelerado, los impactos sobre el agua se vuelven cada vez más graves, llegando hasta la desaparición de manantiales y cursos de agua, como sucede en las provincias de Arauco, Región del Bio Bio y de Malleco y Cautín, Región de la Araucanía, donde entre los meses de Diciembre a Marzo las comunidades no tienen agua, y los municipios deben surtir con camiones aljibe a las comunidades, asumiendo un costo que es responsabilidad de las empresas forestales.
Tercero, la sustitución de suelos agrícolas y bosque nativo. El fomento a la actividad forestal se desarrolla en desmedro de la actividad campesina, no existiendo políticas relacionadas con la recuperación de suelos agrícolas, es decir para la vida de las comunidades afectadas. Los incentivos a la actividad forestal provocan pobreza, las comunas con las mayores superficies de plantaciones, presentan los menores índices de desarrollo humando del país, así como las tasas de migración más altas, llegando a tasas de crecimiento poblacional negativo en algunas comunas. Sin mencionar los graves impactos a las economías locales y la disminución en la producción de alimentos para el país.
Cuarto. La principal justificación de la medida anunciada por la presidenta Bachelet, es el incremento del empleo, sin embargo la precariedad de los empleos del sector forestal no justifican seguir con la destrucción que las plantaciones han generado. En Chile hay 133 mil trabajadores forestales, de ellos, sólo entre el 25 y 30% tiene contrato permanente; el 82% se encuentra bajo la línea de la pobreza; la subcontratación ha dificultado la generación de derechos colectivos. La posición política del Gobierno solo demuestra los niveles de sometimiento y corrupción del poder público a estos grupos económicos.
Los recursos que se entregarán frente a la crisis económica, se suman a otros subsidios que el gobierno entrega a las forestales. En Octubre recién pasado, el gobierno, a través de InnovaChile de CORFO, anunció la entrega de 3000 millones de pesos a un Consorcio Tecnológico Bioenercel formado por las 3 grandes empresas forestales – Arauco, CMPC, Masisa- las Universidades de Concepción, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y la Fundación Chile - para investigación de la producción de biocombustibles de segunda generación. Esto además del apoyo y compromiso otorgado por el gobierno para plantar 1.000.000 hectáreas más en 10 años.
En definitiva, este Modelo Forestal es responsable de incrementar la pérdida de suelos agrícolas, disminuir y desaparecer las fuentes de agua subterráneas y superficiales, sustituir el bosque nativo, destruir la forma de vida y la cultura de las comunidades, por lo tanto:
·Rechazamos que estas decisiones -que afectan a muchos territorios y comunidades- se tome de manera bilateral entre el gobierno y las grandes empresas forestales, excluyendo a las comunidades que viven el flagelo de la expansión de las plantaciones.
·Exigimos que se termine con los subsidios directos e indirectos al sector forestal con los recursos de todos los habitantes de Chile y que no son para favorecer a grupos económicos específicos. Se debe terminar con el saqueo del Estado de bienes y recursos que son públicos y colectivos y que corresponden a las soberanías populares.
·Exigimos suspender la medida de aumentar los recursos para el subsidio forestal, que se derogue definitivamente el Decreto Ley 701 y que se reorienten los recursos a apoyar la actividad agrícola campesina y a la recuperación de los daños causados para promover y potenciar las economías locales y diversas.
Acción por los Cisne Valdivia
Attac - Santiago
Comunidad Mapuche Huilliche Pepiukelen, Pargua Calbuco
Comité Agua Potable Rural, Isla Quihua, Calbuco
Comité Ambiental "Aguas Azules" de Calbuco
Comunidad Indígena Julia Santibañez LLankel, Comunidad de
Futrono
Comunidad Lorenzo Quilapi, Keuke - Los Sauces
Consejo Comunitario de Melipeuco
Corporación Unión Araucana, Padre Las Casas
Federación de Estudiantes Universitarios, Valparaíso
Feministas Autónomas, Santiago
Huequecura Libre, Santa Bárbara
Junta de Vecinos rural, Pivadenco - Los Sauces
Konun Traytrayko (Pto. Saavedra- Temuco)
La Araucana Tren tren, de Carahue
Lof Rewe Kayulfe, de Toltén
Nguallen Pelu Mapu, Los Sauces
Observatorio Ciudadano
Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales OLCA.
Organización Comunitaria Protectores de la Tierra - Nguallen Pelu
Mapu, Los Sauces
R.A.D.A. Temuko
Red de Acción por la Justicia Ambiental y Social - RAJAS
Red de Bosque, Curarrehue
Salvemos Cobquecura
Territorio Lifko Melipeuko
Werken del Consejo de Loncos de Río Bueno
0 comentarios:
Publicar un comentario