martes, 7 de julio de 2009
Posted in
BOTNIA
,|
CELULOSA
,|
CONTAMINACION
,|
DIOXINA
,|
ECOLOGIA
,|
ENCE
,|
ESPAÑA
,|
GREENPEACE
,|
OVIEDO
,|
PASTERA
|
En España siguen sin querer a ENCE - 07/07/2009
Greenpeace denuncia la contaminación y degradación del litoral asturiano
Oviedo.- La organización Ecologista Greenpeace ha hecho público hoy su informe anual sobre el estado de la costa española en el que denuncia que la contaminación de las aguas y la "degradación" del litoral asturiano, así como la actitud de los ayuntamientos y la "complicidad" del Principado.
Según recoge el informe "Destrucción a toda costa 2009", siete de los nueve espacios protegidos del litoral de la región están en peligro debido, entre otras cosas, a que en ellos hay proyectadas 33.543 viviendas, dos puertos, 4 polígonos industriales y un campo de golf.
Vista del mar Cantábrico tomada desde la playa de Santa Marina, en Ribadesella.
Además Asturias es la comunidad con mayores niveles de contaminación marina de toda la costa cantábrico-atlántica.
El Principado es, después del País Vasco, la comunidad con menos Espacios Naturales Protegidos (ENP) en los 406,5 kilómetros de costa, de los cuales sólo 63,6 (el 15,6 por ciento) cuentan con algún tipo de protección.
Estos 63 kilómetros se encuentran acosados, según Greenpeace, por el urbanismo "al más puro estilo Mediterráneo", la construcción de infraestructuras y la contaminación pese a que en el año 2005 se aprobó el Plan de Ordenación del Litoral Asturiano (POLA), que protege los primeros 500 metros de la costa, y que a día de hoy sigue sin implementarse.
Los ecologistas culpan a los ayuntamientos de la situación y alegan que son ejecutores "a la carta" de los proyectos de los promotores inmobiliarios para lo que cuentan con la "complicidad" del Principado en apoyo de un urbanismo "insostenible" localizado sobre todo en Tapia de Casariego, Navia, Cudillero, Castrillón, Corvera, Gozón, Oviedo, Gijón, Parres, Colunga, Llanes y Ribadeo.
Además el informe indica que hay proyectados 20 campos de golf en la región, como el que amenaza el Paisaje Protegido de Cabo Peñas, y 2.500 nuevos amarres.
La industria es, según el informe, la principal responsable de la contaminación que vive el litoral asturiano ya que "goza de una permisividad excesiva de las administraciones", a lo que hay que sumar el intenso tráfico marítimo y a las actividades portuarias.
Entre las industrias más sucias, Greenpeace pone especial énfasis en las centrales térmicas por su contribución al cambio climático, la contaminación térmica de las aguas y polución química que producen con el lavado de carbones y destaca la de Aboño, por su cercanía a la costa.
El análisis de las muestras ambientales realizado por la organización revela que la presencia de sustancias contaminantes vinculadas a las operaciones portuarias, como hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH) y metales pesados, es la más elevada de la costa atlántico-cantábrica española.
En este sentido, asegura que parte de la situación actual es achacable a la ampliación del puerto de El Musel ya que los lodos portuarios son muy contaminantes por su contenido en metales pesados, hidrocarburos, aceites y pinturas y han sido vertidos de forma constante en Asturias.
Según Greenpeace, en los últimos siete años se han realizado vertidos de lodos pertenecientes a diez puertos diferentes en 25 puntos de la costa.
Asimismo se detallan los puntos en peligro de la costa asturiana, entre los que figuran las zonas protegidas de las rías del Eo, Villaviciosa, Ribadesella y Tinamayor, Peñarronda-Barayo, el cabo Busto-Luanco, los yacimientos de icnitas entre Gijón y Ribadesella y la playa de Vega.
Estos se encuentran amenazados por las ampliaciones de distintos puertos, creación nuevos astilleros, el creciente urbanismo, las infraestructuras, la térmica de Aboño, la regasificadora y la contaminación causada por las actividades portuarias y los vertidos de empresas como Renny Picott y la papelera Ence.
El informe también recuerda que en la costa asturiana, además de las distintas especies vegetales, hay salmones, nutrias, delfines, marsopas, lampreas, anguilas y numerosas especies de aves e invertebrados de interés comercial como la navaja o la almeja, cuya supervivencia y conservación depende del buen estado del ecosistema.
A nivel nacional, el informe constata que más de la mitad de los espacios naturales protegidos de la costa española están amenazados y señala a la Comunidad Valenciana, Andalucía y Canarias como las tres autonomías que "más desprecio" muestran hacia esos espacios.
El informe ha analizado el estado de 233 espacios litorales amparados por alguna figura de protección nacional o internacional, repartidos en los más de 8.000 kilómetros de costa, de los que más de la mitad, en concreto 120, sufren algún tipo de amenaza por proyectos urbanísticos, de infraestructuras o contaminación.
(fuente)
Thumbnails powered by Thumbshots
Greenpeace denuncia la contaminación y degradación del litoral asturiano
Oviedo.- La organización Ecologista Greenpeace ha hecho público hoy su informe anual sobre el estado de la costa española en el que denuncia que la contaminación de las aguas y la "degradación" del litoral asturiano, así como la actitud de los ayuntamientos y la "complicidad" del Principado.
Según recoge el informe "Destrucción a toda costa 2009", siete de los nueve espacios protegidos del litoral de la región están en peligro debido, entre otras cosas, a que en ellos hay proyectadas 33.543 viviendas, dos puertos, 4 polígonos industriales y un campo de golf.
Vista del mar Cantábrico tomada desde la playa de Santa Marina, en Ribadesella.
Además Asturias es la comunidad con mayores niveles de contaminación marina de toda la costa cantábrico-atlántica.
El Principado es, después del País Vasco, la comunidad con menos Espacios Naturales Protegidos (ENP) en los 406,5 kilómetros de costa, de los cuales sólo 63,6 (el 15,6 por ciento) cuentan con algún tipo de protección.
Estos 63 kilómetros se encuentran acosados, según Greenpeace, por el urbanismo "al más puro estilo Mediterráneo", la construcción de infraestructuras y la contaminación pese a que en el año 2005 se aprobó el Plan de Ordenación del Litoral Asturiano (POLA), que protege los primeros 500 metros de la costa, y que a día de hoy sigue sin implementarse.
Los ecologistas culpan a los ayuntamientos de la situación y alegan que son ejecutores "a la carta" de los proyectos de los promotores inmobiliarios para lo que cuentan con la "complicidad" del Principado en apoyo de un urbanismo "insostenible" localizado sobre todo en Tapia de Casariego, Navia, Cudillero, Castrillón, Corvera, Gozón, Oviedo, Gijón, Parres, Colunga, Llanes y Ribadeo.
Además el informe indica que hay proyectados 20 campos de golf en la región, como el que amenaza el Paisaje Protegido de Cabo Peñas, y 2.500 nuevos amarres.
La industria es, según el informe, la principal responsable de la contaminación que vive el litoral asturiano ya que "goza de una permisividad excesiva de las administraciones", a lo que hay que sumar el intenso tráfico marítimo y a las actividades portuarias.
Entre las industrias más sucias, Greenpeace pone especial énfasis en las centrales térmicas por su contribución al cambio climático, la contaminación térmica de las aguas y polución química que producen con el lavado de carbones y destaca la de Aboño, por su cercanía a la costa.
El análisis de las muestras ambientales realizado por la organización revela que la presencia de sustancias contaminantes vinculadas a las operaciones portuarias, como hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH) y metales pesados, es la más elevada de la costa atlántico-cantábrica española.
En este sentido, asegura que parte de la situación actual es achacable a la ampliación del puerto de El Musel ya que los lodos portuarios son muy contaminantes por su contenido en metales pesados, hidrocarburos, aceites y pinturas y han sido vertidos de forma constante en Asturias.
Según Greenpeace, en los últimos siete años se han realizado vertidos de lodos pertenecientes a diez puertos diferentes en 25 puntos de la costa.
Asimismo se detallan los puntos en peligro de la costa asturiana, entre los que figuran las zonas protegidas de las rías del Eo, Villaviciosa, Ribadesella y Tinamayor, Peñarronda-Barayo, el cabo Busto-Luanco, los yacimientos de icnitas entre Gijón y Ribadesella y la playa de Vega.
Estos se encuentran amenazados por las ampliaciones de distintos puertos, creación nuevos astilleros, el creciente urbanismo, las infraestructuras, la térmica de Aboño, la regasificadora y la contaminación causada por las actividades portuarias y los vertidos de empresas como Renny Picott y la papelera Ence.
El informe también recuerda que en la costa asturiana, además de las distintas especies vegetales, hay salmones, nutrias, delfines, marsopas, lampreas, anguilas y numerosas especies de aves e invertebrados de interés comercial como la navaja o la almeja, cuya supervivencia y conservación depende del buen estado del ecosistema.
A nivel nacional, el informe constata que más de la mitad de los espacios naturales protegidos de la costa española están amenazados y señala a la Comunidad Valenciana, Andalucía y Canarias como las tres autonomías que "más desprecio" muestran hacia esos espacios.
El informe ha analizado el estado de 233 espacios litorales amparados por alguna figura de protección nacional o internacional, repartidos en los más de 8.000 kilómetros de costa, de los que más de la mitad, en concreto 120, sufren algún tipo de amenaza por proyectos urbanísticos, de infraestructuras o contaminación.
(fuente)
Thumbnails powered by Thumbshots
0 comentarios:
Publicar un comentario